sábado, 17 de marzo de 2018

SAN LUIS HIZO PUNTA, Y LO QUE TIENE PUNTA DUELE



La cumbre convocada este fin de semana en San Luis no es la primera ni la única, ni será la última con que un desperdigado peronismo (parte principal de una desperdigada oposición) trata de rearmarse para hacerle frente al gobierno de Macri, y ofrecer una alternativa competitiva de cara a las elecciones presidenciales del año que viene.

Sin embargo, tiene la particularidad de ser la continuidad del espacio de unidad que se expresó en las calles el 21F, en la movilización convocada por Moyano y los camioneros; que agrupó detrás suyo a las fracciones más combativas del sindicalismo. 

De eso se sigue que su volumen político es obvio (aunque algunos pretenden minimizarlo), más allá incluso de la enumeración de los dirigentes y referentes que fueron a la provincia de los Rodríguez Saá, o más bien del Alberto: el Adolfo obviamente debe guardar las formas porque se prepara para disputar la próxima elección provincial, en un distrito que se ha tornado complicado y en el que la marca "Cambiemos" pisa fuerte.

Los que dieron el presente en La Pedrera -desde el propio Moyano a Kicillof, pasando por el "Chivo" Rossi, el "Coqui" Capitanich o los presidentes del PJ Nacional y bonaerense- no atravesaron siempre juntos el ciclo político comenzado en el 2003 con Néstor y finalizado en el 2015 tras el segundo mandato de Cristina; y muchos ni siquiera han tenido el mismo alineamiento desde que comenzó el gobierno de Macri, aunque algunos pretenden ceñirlo a una convocatoria exclusivamente kirchnerista, que habría "copado" un ámbito reservado al peronismo, o cosas por el estilo.

De hecho no fue Cristina, consistente con su estrategia de los últimos tiempos de correrse al costado para no opacar con su presencia las tratativas y conversaciones en pos de la unidad, y para no darle tampoco al gobierno un blanco fácil sobre el que caer. Sin embargo y a juzgar por las reacciones de algunos medios, pretenden sustituirla por Moyano, en ese rol. 

Y por contraste fueron algunos (como Aníbal Fernández) que en los últimos tiempos vienen marcando diferencias con la construcción política de CFK. No hace falta recordar las cuitas de más larga data del propio Moyano con Cristina, justamente porque todo indica que los dos han decidido dejarlas atrás, en aras de construir la unidad. 

Precisamente en la diversidad (con preeminencia de referencias kircneristas, como la hay en la base de votos del PJ, por si alguno lo ha olvidado) radica la potencia política del cónclave, un paso más en el camino de acercar posiciones, discutir estrategias, perfilar un discurso y una propuesta y -como no- acordar también los bordes de la construcción de la principal oposición, y las reglas de juego para dirimir espacios hacia su interior.

Hasta donde sabemos, la movida no fue por invitación exclusiva, y el que no fue, es porque no quiso. De modo que siendo voluntario ir o quedarse afuera, no parece muy inteligente pegarle desde allí al intento de otros de limar asperezas, y construir unidad opositora. O generar otros encuentros "en espejo", como el de Massa y Randazzo en algo que si no es el armado de una colectora peronista que facilite la reelección de Vidal en la PBA, se le parece bastante.

Por supuesto que desde el dispositivo de medios oficialistas (y de algunos opositores "autocríticos") se pondrá el acento en los que no fueron, de los que habrá que ver en definitivas a quienes se esperaba y pegaron el faltazo: es obvio que esto solo aplica a algunos de los gobernadores (como Uñac) sobre los que el gobierno operó fuerte en los días previos: señal de que la juntada molesta, aunque se la quiera ningunear.    

Hasta las ideas del "copamiento kirchnerista" de una reunión del PJ, o de "Moyano sumándose a una movida K" lucen absurdas si se repara en que las esgrimen los que hasta hace no mucho tiempo decían que el del kirchnerismo era un ciclo agotado, entre otras cosas por su falta de peso específico hacia el interior del peronismo, o por su falta de anclajes sólidos con el mundo sindical.

Por supuesto que no estuvo representado en San Luis el "peronismo Macri's friendly", desde Urtubey a Pichetto, pasando por Bossio y Schiaretti, o buena parte de los gobernadores: justamente lo que se movilizó hasta las tierras puntana fue el hasta no hace mucho disperso y multiforme colectivo del peronismo "no asimilado ni asimilable"; al que no se lo puede computar dentro del "peronismo reciclado" que hace poco verbalizó Massot, como continuador de la obra del gobierno de "Cambiemos".

Y cuando el gobierno empieza a dar claras señales de agotamiento político porque se suman las dificultades económicas, es ese hecho (la presencia de una porción importante del peronismo que persiste en la oposición, en lugar de apostar a una "Moncloa" criolla con el gobierno) el que suscita esperanzas por un lado; y despierta nerviosismos por el otro, porque introduce un factor más de incertidumbre a futuro, donde hasta después de las elecciones de octubre había certeza de hegemonías perdurables e indisputadas.

Si las esperanzas se confirman y los temores se disipan, o viceversa, es algo que solo el tiempo dirá. Por lo pronto lo de este fin de semana en San Luis no es poca cosa.

3 comentarios:

  1. Gerar Boxos Perogrullié17 de marzo de 2018, 12:30

    Esta cumbre atrasa como el no al Alca de 2005 que nos dejó fuera del mundo. Con el Dr Randazzo y el Ingeniero Massa planteamos un peronismo moderno como parteaguas que deje atrás el ciclo involutivo kirche-postmarxista-filochavista .

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  2. No se entiende porqué los medios le dan tanto espacio a una reunión irrelevante, sin dirigentes representativos y liderada por un sector político
    agotado. Hay gente que se pone nerviosa por nada.
    El Colo.

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  3. Si hablamos de ciclos agotados y viejas recetas que fracasaron en nuestro pais, deberian comunicarle a Macri y su ex socio Massa que apuesta fuertemente al G20, donde somos utilizados como forros de las multinacionales, que las politicas economicas son del siglo pasado,conducen a una crisis. El mundo cambio,hasta Donald Tump se volvio kirchnerksta.Vayan a aplicar recetas de manual amarillento a otro lado

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